22 de septiembre de 2021
¿Te cuesta trabajo dormir? ¿Contar borreguitos no te funciona? A veces, conciliar el sueño puede ser un gran desafío, ya sea porque tuviste una semana pesada o tu cuerpo simplemente está cansado. Pero esas noches de dar vueltas pueden dar como resultado un mal rendimiento, mal humor, aumento de peso y agotamiento. Si tienes dificultades para dormir tenemos una buena noticia, la primera es que no estás condenado a moverte y dar vueltas en la cama cada noche y la segunda noticia es que hay una serie de cosas que puedes agregar a tu rutina para lograr el sueño como un bebé.
También recuerda que las personas adultas necesitan dormir de 7 a 8 horas para estar bien descansados. Para conseguirlo necesitas tener una rutina para descansar la cantidad de horas necesarias. Comienza con estos consejos para lograr el sueño que tanto deseas.
Tu cuerpo ama la regularidad, y tu sueño no es una excepción. Establece un horario de sueño consistente, y trata de acostarte y despertarte a la misma hora todos los días, incluso los fines de semana. Esto ayuda a regular tu reloj biológico, facilitando el proceso de quedarte dormido y despertarte sintiéndote renovado.
Las siestas pueden ser tentadoras, pero si las prolongas demasiado, pueden interferir con tu sueño nocturno. Si necesitas descansar durante el día, limita la siesta a unos 20-30 minutos y asegúrate de hacerlo antes de las 3 p.m.
Tanto la cafeína como el alcohol pueden afectar negativamente tu calidad de sueño. Limita la cafeína, especialmente por la tarde, y evita el alcohol antes de acostarte. Opta por alternativas relajantes como infusiones de hierbas para preparar tu cuerpo para el descanso.
Haz de tu dormitorio un refugio para el sueño. Mantén la habitación oscura, tranquila y a una temperatura agradable. Invierte en un colchón y almohadas cómodos para asegurar un buen soporte y comodidad.
La luz azul emitida por dispositivos electrónicos puede interferir con la producción de melatonina, la hormona del sueño. Intenta apagar los dispositivos al menos una hora antes de acostarte. En su lugar, opta por actividades relajantes como la lectura de un libro.
Crea una rutina relajante antes de acostarte. Puede ser leer un libro, tomar un baño caliente, practicar la meditación o cualquier actividad que te ayude a desconectar y preparar tu mente y cuerpo para el sueño.
La actividad física regular puede mejorar la calidad del sueño, pero evita hacer ejercicio intenso justo antes de acostarte. Opta por actividades más relajantes como el yoga o paseos ligeros al final del día.
Asocia tu cama con el sueño y evita realizar otras actividades, como trabajar o ver televisión, en ella. Esto ayuda a entrenar a tu cerebro para reconocer que es hora de descansar cuando te acuestas.
Antes de acostarte, dedica tiempo a liberar el estrés y las preocupaciones. Puedes mantener un diario para escribir tus pensamientos o practicar técnicas de relajación como la respiración profunda.
Si a pesar de probar estos consejos, tus problemas para dormir persisten, considera buscar la ayuda de un profesional de la salud. Un médico o especialista en sueño puede ayudarte a identificar las posibles causas subyacentes y ofrecer tratamientos personalizados.
Ahora sí ya estás listo para conciliar el sueño que tanto deseas, pon en práctica estos consejos y hazlos parte de tu rutina diaria, porque al igual que alimentarse bien y estar físicamente activos, dormir bien es fundamental para tu bienestar.
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