Depende de la causa. Los casos leves pueden tratarse con medicamento o fisioterapia (también conocida como reeducación del suelo pélvico). En todos los otros casos, el mejor tratamiento es la cirugía. Pese a los diversos estudios al respecto, hasta la fecha, ningún tratamiento ha demostrado ser superior a la cirugía.

Si tienen los conocimientos, la experiencia, el criterio y la capacidad técnica para tratar la incontinencia urinaria, es claro que están facultados. En nuestro país, existen ginecólogos capacitados para realizar estudios urodinámicos y utilizar todas las opciones, tanto medicamentos como cirugías.

No. Los niños con enfermedades neurológicas o malformación del uréter, vejiga y uretra, entre otros padecimientos, pueden tener incontinencia urinaria. Los hombres con enfermedades neurológicas o que se han sometido a cirugía de la uretra o próstata (en caso de cáncer de próstata, prostatectomía radical) también pueden tener este síntoma.

Las mujeres están más propensas que los hombres a presentar incontinencia por las diferencias en sus órganos internos, el embarazo y el parto. La incontinencia es un síntoma común de gran impacto, tanto a nivel personal como social: 4.4% de la población mundial la padece; del total, 75% son mujeres y el 25% restante, hombres. Fuente: Catálogo de la guía de incontinencia de TENA.

La incontinencia puede presentarse en cualquier momento de la vida de la mujer, independientemente de la edad, aunque es más frecuente en ciertas etapas. Las pérdidas de orina pueden producirse en forma de pequeñas gotas, pero también en cantidades abundantes. Uno de los factores que explica la alta incidencia en mujeres es la menopausia, etapa en la que se produce una disminución importante de estrógenos, los cuales son necesarios para mantener el grosor de las paredes de la uretra.

La incontinencia puede presentarse en cualquier momento de la vida de la mujer, independientemente de la edad, aunque es más frecuente en ciertas etapas. Las pérdidas de orina pueden producirse en forma de pequeñas gotas, pero también en cantidades abundantes. Uno de los factores que explica la alta incidencia es tener varios partos. Es posible que los músculos que sirven de apoyo pierdan fuerza, lo cual reduce la unión entre la uretra y la vejiga y, por ende, la capacidad de resistencia a la salida de orina.

Depende del tipo de incontinencia urinaria que tengas (o del paciente que cuidas). Los estados físico y mental también son factores decisivos al momento de elegir los pañales para adulto o la ropa interior desechable. Los productos correctos pueden ofrecer mayor comodidad y reducir los cambios de ropa al día. TENA cuenta con una amplia gama de productos, pensada para todos los tipos de necesidades y niveles de incontinencia. En nuestra sección de productos podrás encontrar el que mejor se adapte a tus actividades diarias.

Las ventajas de estos ejercicios sólo se perciben después de un par de semanas. Sin embargo, aunque todavía no hayas recuperado el control total sobre tu vejiga, deberás notar una mejoría. Si tienes incontinencia de esfuerzo, es posible que se cure solamente después de un periodo de 8 a 12 meses.

Es una glándula propia del sexo masculino localizada en la base de la vejiga, alrededor de la uretra, que segrega líquido durante la eyaculación. En ocasiones, en hombres mayores, la glándula crece y obstruye la uretra. Uno de los síntomas es un flujo de orina débil.

Es la incapacidad de controlar la vejiga, que puede causar la pérdida involuntaria de orina.

Además de visitar nuestro sitio, que ofrece diverso contenido, consejos y experiencias de otras personas, siempre es importante consultar con un médico y hablar con un familiar. Son los más indicados para ayudarte en este proceso. Haz clic aquí para conocer todos nuestros productos. Si deseas más información acerca de la incontinencia en mujeres, haz clic aquí. Si eres hombre y tienes incontinencia urinaria, obtén más información aquí.

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Los músculos del suelo pélvico forman un gran soporte entre las piernas, que va desde el pubis en la parte frontal hasta la base de la columna, en la espalda. Son los músculos encargados de contraer y relajar el esfínter.

La acción de orinar.

Cada vez que comes o bebes, tu cuerpo absorbe líquidos. La función de los riñones es filtrar los residuos de estos líquidos y eliminarlos del cuerpo para así producir la orina. Las pequeñas gotas pasan continuamente de los riñones a la vejiga, que se va dilatando poco a poco. Cuando está llena, el cerebro recibe la señal de que ya es hora de ir al baño. Para que la orina se elimine, el cerebro envía órdenes para que el músculo más grande de la vejiga se apriete y se contraiga. Al mismo tiempo, envía la orden a los músculos de apoyo (o del suelo pélvico) que rodean la uretra (la salida de la vejiga) para que se relajen y dejen pasar la orina.

Depende de factores como la edad, la alimentación y el nivel de actividad, pero el promedio es de 4 a 8 veces al día. Algunas personas también sienten ganas de orinar en la noche, lo cual interrumpe el sueño.

Una de cada tres mujeres presenta escapes involuntarios de orina.* El embarazo y el parto, así como la menopausia, contribuyen a dicha cifra. Además, hasta los más jóvenes pueden tener pérdidas esporádicas de orina, muchas veces después de una rutina intensa de ejercicio. Los fumadores, aunque sean jóvenes, también son más propensos, ya que tosen con más frecuencia y eso puede relajar los músculos pélvicos. El consumo excesivo de café, té o alcohol también puede contribuir a la incontinencia.

*De acuerdo con la institución estadounidense Urology Care Foundation.

La mejor forma de tratar de evitar o reducir la incontinencia urinaria es fortalecer los músculos del suelo pélvico mediante los ejercicios de Kegel. No obstante, su eficacia es mayor si presentas incontinencia de esfuerzo. Los demás tipos de incontinencia requieren otros tratamientos, así que debes consultar con un médico.

No te preocupes. La incontinencia durante el acto sexual es poco frecuente, así que no es motivo para dejar que afecte tu vida íntima. Con los ejercicios para los músculos del suelo pélvico incluso puedes mejorarla, ya que se fortalecen. Si te preocupa la incontinencia, antes de tener sexo, trata de vaciar la vejiga y evitar bebidas diuréticas con gas y café.

Aquí encontrarás las formas más comunes de incontinencia urinaria, pero seguramente existen otros casos poco frecuentes que se manifiestan con otros síntomas y que requieren otros tratamientos.Por eso, es importante que consultes con un médico para que evalúe tu caso de manera individual y aislada para determinar el mejor tratamiento.

Los escapes involuntarios de orina son frecuentes en hombres y pueden presentarse por diferentes motivos. En realidad, en promedio, uno de cada cuatro hombres mayores de 40 años* presenta algún tipo de incontinencia. Las causas varían, pero las más comunes son debilitamiento de los músculos del suelo pélvico, la edad, obesidad o crecimiento de la próstata. En otros casos, puede ser un síntoma hereditario. Si deseas más información sobre la incontinencia en hombres, haz clic aquí. Y no olvides consultar con tu médico lo más pronto posible.

*Con base en investigaciones realizadas por SCA en 2012 en hombres mayores de 40 años en Estados Unidos, Reino Unido, Alemania, Italia, Rusia y México. Datos de archivo no publicados.

Antes que nada, es importante saber cómo nos debemos de sentir al contraer estos músculos. Se encuentran en la parte más baja del abdomen, por debajo del ombligo y cerca de los huesos laterales de la pelvis. Al intentar contraerlos, sentirás una leve tensión al tacto. Nunca se sentirá una contracción más fuerte, como sucede con los cuádriceps y los glúteos, que son músculos más grandes. La sensación es más leve. Si notas protuberancias en la parte inferior del abdomen o sientes una contracción más fuerte, es probable que estés haciendo mal el ejercicio.

Consiste en una sencilla técnica para lograr una mayor elasticidad en los tejidos alrededor de la vagina, lo cual reduce el riesgo de lesiones durante el parto, así como la necesidad de episiotomía. Ayuda a prepararse para la sensación de presión y estiramiento cuando el bebé pasa por la vagina. Conocer estas sensaciones ayuda a que los músculos estén relajados y no se dañen durante el parto, además de facilitar la salida del bebé; por lo tanto, también se reduce la probabilidad de incontinencia urinaria.

Es muy sencillo cuidar y ejercitar el suelo pélvico: debes tener una higiene más adecuada, lograr un mayor control de la vejiga, dar seguimiento al peso y hacer ejercicios de fortalecimiento que puedas realizar todos los días sin interferir con tus actividades.

Aunque en muchos países la tendencia es practicar cesáreas para evitar las consecuencias de un parto traumático, en general, una cesárea programada se considera una cirugía de riesgo. No hay ninguna garantía de que no dejará secuelas. Por lo tanto, solo se recomienda programar una cesárea en caso de complicaciones previas en el suelo pélvico, como prolapso, lesiones o incontinencia urinaria grave.

Existe un tipo de incontinencia llamada incontinencia urinaria de urgencia, asociada con una irritación en el músculo detrusor de la vejiga. Es este músculo el que, cuando se contrae de manera involuntaria, avisa al cerebro que la vejiga está llena y que es momento de ir al baño. Algunos alimentos contribuyen a esta irritación, como alcohol, té, café, refrescos y, en general, todos los que contienen cafeína. De cualquier manera, lo mejor es acudir con un especialista.

Las toallas sanitarias NO sirven para protegerte cuando tienes escapes involuntarios de orina, ya que al usarlas con este fin corres el riesgo de tener escurrimientos y, por ende, exponerte a una situación bochornosa, ya que están diseñadas para contener un flujo más espeso que la orina (la menstruación). Te recomendamos usar toallas específicas para escapes de orina, como las de TENA, que neutralizan el olor característico a amoníaco de la orina y ofrecen seguridad, limpieza y discreción.

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Una musculatura fuerte y tonificada tiene mayor sensibilidad y capacidad de lubricación. Además, los músculos que se contraen y relajan durante el clímax estarán más fortalecidos, así que los orgasmos serán más prolongados e intensos. Otro beneficio es que, al tener mayor control de los músculos vaginales, las mujeres pueden aprender nuevas técnicas de masaje del pene de su pareja durante la penetración.

Sí. Pueden servir como carga para los músculos que rodean la vagina. Al introducirlas y mantenerse de pie, esa zona se contrae. Hacer este ejercicio por 20-30 minutos ayuda a fortalecer dicha musculatura. Por otro lado, además de fortalecer el suelo pélvico, también es importante aprender a controlarlo. Es recomendable complementar el uso de las bolas chinas con otros ejercicios más específicos. Si alguna vez has tenido problemas de contracción, acude con un profesional para que te evalúe antes de usarlas.

La incontinencia puede causar trastornos en la mujer que, muchas veces, se siente limitada e impotente. Por consiguiente, su autoestima también se ve afectada. Es importante que tengas una idea más amplia de lo que sucede con tu cuerpo para que logres identificar los recursos que puedes utilizar y enfrentar la situación. Por lo general, al inicio del tratamiento para la incontinencia se percibe una mejoría en el estado de ánimo. De todos modos, si el síntoma impide llevar una vida normal o la depresión se prolonga por más de seis meses, se recomienda buscar ayuda psicológica.

Es muy importante que acudas con un profesional para saber si el problema se origina en el suelo pélvico. Luego de que te evalúe un ginecólogo, este puede remitirte a un fisioterapeuta especializado o darte un tratamiento a cargo de un equipo multidisciplinario: ginecólogo, urólogo, fisioterapeuta, proctólogo, psicólogo y nutriólogo.

Si no logras contraerlo, significa que el ejercicio es demasiado intenso para tu suelo pélvico, así que no sería adecuado para ti. En este caso, solo realiza aquellos ejercicios en los que puedes sentir la contracción: a medida que tu suelo pélvico vaya fortaleciéndose, verás mayores beneficios.

Tu experiencia, síntomas y la evaluación de un médico son prácticamente decisivos para el diagnóstico de incontinencia urinaria. Sin embargo, puedes confirmarlo con algunas pruebas de laboratorio, tales como:

• Residuo posmiccional para medir la cantidad de orina que queda después de la micción.
• Prueba de orina tipo I o urocultivo para descartar una infección urinaria.
• Prueba de esfuerzo urinario (se pide a la persona permanecer de pie, con la vejiga llena, y toser).
• Ultrasonido abdominal o pélvico.
• Radiografía contrastada.
• Cistoscopia (exploración del interior de la vejiga).
• Estudios urodinámicos (para medir la presión y el flujo de orina).
• Otros estudios.

No. Es importante tener claro desde hace cuánto tiempo se produce el síntoma; por ejemplo, si es provocado por algo en especial, como algún alimento o bebida. Para tener un diagnóstico correcto, consulta con un médico.

Este tipo de incontinencia se conoce como incontinencia de esfuerzo. Ocurre cuando se realiza un esfuerzo, como toser, estornudar, brincar o cargar peso. Dicho esfuerzo causa presión sobre la vejiga, la cual se dilata, y los músculos del suelo pélvico no logran contraerse lo suficiente para retener la orina. Es uno de los problemas urinarios más frecuentes en mujeres, principalmente durante actividades físicas.

Durante el embarazo, el cuerpo no solo cambia físicamente, sino también desde el punto de vista hormonal. Los cambios hormonales, junto con la presión que el útero ejerce sobre la vejiga y el esfuerzo del parto, debilitan los músculos del suelo pélvico.

En muchas ocasiones, sí. Uno de los síntomas de la diabetes es la poliuria (orina en exceso), que provoca, además de muchas idas al baño, escapes de orina.

También conocida como enuresis, la incontinencia urinaria en niños más grandes puede ser diurna o nocturna y, en ocasiones, puede deberse a otras causas, como infección urinaria, inestabilidad de la vejiga (contracciones que no pueden evitarse) o problemas neurológicos en la maduración del mecanismo de micción. Si se presenta en niños mayores de 5 años, es necesario acudir con un urólogo para una evaluación detallada, ya que es importante descartar problemas asociados o posibles malformaciones congénitas.

Quien presenta escapes involuntarios de orina leves o grandes puede tener la tranquilidad, la seguridad y la comodidad que ofrece la ropa interior desechable TENA Pants Discreet. Gracias a su diseño discreto, corte francés y tela color piel que se ajusta perfectamente al cuerpo, podrás sentirte protegida sin dejar de sentirte femenina. Su gel súper absorbente brinda mayor seguridad contra accidentes, así como total discreción para disfrutar plenamente cada momento.

Sí. Vejiga incontinente es el término más común para la incontinencia, que, de cierta forma, está relacionado con la causa principal de la incontinencia urinaria: la relajación de los músculos del suelo pélvico.

Algunos alimentos pueden aumentar la producción de agua por sus características diuréticas y empeorar la incontinencia urinaria. Llevar un control de los alimentos es una buena forma de reducir bastante los síntomas. Por lo tanto, debes evitar el consumo de alcohol, café, té negro, refrescos, chocolates, picantes, cítricos y azúcar.

Estos esfuerzos causan presión sobre la vejiga, la cual se dilata, y los músculos del suelo pélvico no logran contraerse lo suficiente para retener la orina y se produce la pérdida. Es uno de los problemas urinarios más frecuentes en mujeres, principalmente durante actividades físicas.

Muchas veces, la incontinencia urinaria puede ser un efecto secundario de determinados medicamentos, ya que muchos tienen propiedades diuréticas, es decir, provocan la eliminación de más líquido. Si comenzaste a tomar un medicamento y has percibido pérdidas de orina al mismo tiempo, consulta con tu médico.

Las infecciones urinarias pueden causar hipersensibilidad en la vejiga, lo cual provoca que esta envíe falsas señales de “descarga” al cerebro y, por ende, den ganas de orinar sin que esté llena. Es importante realizar el tratamiento adecuado e informar cualquier anomalía permanente al médico.

Con todo gusto te ayudaremos a que sobrelleves cada vez mejor la incontinencia urinaria y tengas una mejor calidad de vida. Si tienes más dudas sobre nuestros productos, ponte en contacto con nosotros aquí. No obstante, si tienes dudas sobre la incontinencia urinaria, te recomendamos que acudas con un especialista para que recibas una atención más adecuada y personalizada.