Empecemos hablando sobre qué es la próstata. La próstata es una glándula masculina que está situada debajo de la vejiga y que ayuda a la producción de semen y así como cualquier otra glándula del cuerpo, la próstata puede desarrollar diferentes tipos de problemáticas, entre ellas la Hiperplasia Benigna de Próstata, por sus siglas, HBP.

También conocido como adenoma de próstata, la HBP es el crecimiento no maligno del tejido prostático que se da en los hombres de mediana edad en adelante. La HBP es una de las enfermedades más frecuentes en los hombres y es considerada como parte del envejecimiento fisiológico masculino.

Síntomas de la HBP

Los síntomas de la Hiperplasia Benigna de Próstata suelen dividirse en dos rubros: Obstructivo e irritativos. Aquí te dejamos unos cuantos de ellos.

Síntomas Obstructivos

• Chorro de orina débil o intermitente
• Menos fuerza y calibre de la orina
• Sensación de que no se vació completamente la vejiga
• Micción doble, que es orinar dos veces en un periodo de 2 horas
• Goteo postmiccional.

Síntomas Irritativos

• Aumento de la frecuencia con que se orina (Poliaquiuria)
• Nicturia o necesidad de orinar con frecuencia en las noches
• Urgencia repentina de ir al baño
• Incontinencia urinaria de urgencia

¿Hay tratamiento para la Hiperplasia Benigna Prostática?

Sí, como en muchos padecimientos, el diagnóstico temprano de la HBP es vital para evitar complicaciones posteriores, como pueden ser las infecciones recurrentes del tracto urinario, el daño a los riñones o a la vejiga.

En pacientes cuyos síntomas son leves o moderados y que no afectan mucho a la calidad de vida, un tratamiento farmacológico puede ayudar a mejorar el flujo urinario. Para quienes hayan probado lo anterior sin éxito, podrían llegar a tener una cirugía que aliviaría la sintomatología.

Te recordamos que visitar a tu médico y llevar un buen control de tu antígeno prostático será de gran ayuda.